jueves, 14 de abril de 2016

Deshidrátame, adelgázame.

¿Quién no ha visto nunca a un corredor con chubasquero a más de 30ºC? ¿Gente con fajas e incluso envueltos en film en los gimnasios? ¿Boxeadores con enormes sudaderas?


un "buen chubasquero": la bolsa de basura


Pues bien, hoy vamos a desmontar este “milenario mito”…

Hemos visto a muchísima gente haciendo deporte en estas condiciones en todas sus variables: papel de film envolviendo el abdomen, fajas de venta en la tele tienda, enormes sudaderas puestas, entrenamientos en salas sin ventilación, chubasqueros aunque no llueva, camisetas térmicas cuando se podría ir en manga corta, etc.

La sauna: otra vieja leyenda para adelgazar...


¿El motivo? Sudar. ¿Y para qué se pretende sudar? Pues, como no...para adelgazar.
Si, se adelgaza, ¿pero es real esa pérdida de peso?


Si nos pesamos antes de entrenar, y luego después de entrenar tras habernos secado el sudor, la pérdida de peso será evidente, ni te cuento si has usado las “técnicas para sudar más”.
Pero no, esto no es real, tan sólo es pérdida de líquido. Lo que estas sudando no es grasa que estás quemando. Este proceso de quemar grasa haciendo ejercicio físico no es tan sencillo como parece y mucho menos se basa en pasar más calor para sudar más.

En el momento en el que bebemos agua para recuperarnos, ese peso se recupera. Y mucho menos, por ponernos más ropa o fajas en determinada parte del cuerpo, conseguiremos perder grasa de esa zona exclusivamente.


La faja más casera: film de envolver


Y es que la función del sudor es regular la temperatura corporal. Al sudar, se dispersa ese calor acumulado en el cuerpo.



Por eso, al deshidratarnos, lo único que conseguimos es disminuir nuestra cantidad de agua corporal. Esto va asociado a varios riesgos: aumento de la viscosidad de la sangre y se reduce el flujo sanguíneo hacia el músculo, aumento de la frecuencia cardíaca y disminución del rendimiento. Es entonces cuando aparecen los calambres musculares, mareos, fatiga, falta de aliento, dolor de cabeza, pudiendo incluso sufrir un golpe de calor.

Riesgos de la deshidratación



Esto también se puede aplicar a esas “nuevas actividades” tan modernas que están tan en auge, es decir, actividades de siempre que se realizan en salas con una temperatura y humedad elevada. Esto ni mejora la elasticidad, ni “calienta” antes el músculo, ni tiene los beneficios que se le atribuyen, más bien tienen riesgos.


Bikrma yoga, o como deshidratarse haciendo yoga...


Vamos a plantear todo esto de otra manera:
Cuando vamos a una competición, siempre, tanto deportistas como profesionales de la salud, le damos mucha importancia a la hidratación, ya que sabemos que es un factor clave. Entonces, ¿por qué por otra parte intentamos y usamos técnicas de deshidratación?


Hidratación: factor clave en el deporte


No podemos confundir todo esto con la aclimatación al calor, situaciones a las que se exponen determinados deportistas antes de competiciones que van a desarrollar en condiciones extremas, teniendo todos los parámetros de estos entrenamientos muy controlados.  


Aclimatación al calor en deportistas